El Deportivo Cali Femenino rozó la gloria en una final vibrante de la Copa Libertadores Femenina 2025, pero el título terminó en manos del Corinthians, que fue infalible desde el punto penal y se impuso 5-3 en la tanda tras un empate sin goles en el tiempo reglamentario.

El equipo colombiano dejó una gran actuación en Asunción, resistiendo el poder ofensivo del conjunto brasileño y demostrando carácter, orden y corazón en cada jugada. Sin embargo, un cobro al travesaño de Kelly Ibargüen marcó la diferencia en la definición, permitiendo que el “Timao” celebrara su sexta Libertadores, la tercera consecutiva.

El partido comenzó con dominio alternado. El Cali intentó proponer desde el arranque, presionando alto y buscando espacios por las bandas. Melanin Aponzá fue una de las más incisivas por derecha, desbordando en varias oportunidades a la defensa rival.

El Corinthians, fiel a su estilo, tomó el control de la pelota y generó las primeras llegadas de peligro. A los 13 minutos, Duda avisó con un cabezazo que contuvo sin problemas Luisa Agudelo, figura del equipo vallecaucano. La arquera respondió una y otra vez, especialmente a los 22’, cuando desvió un potente remate de media distancia.

En el cierre del primer tiempo, el cuadro brasileño celebró un gol de Erika, pero el VAR intervino para anular la jugada por fuera de juego de Vic Albuquerque, quien interfirió en la visual de la guardameta.

Tras el descanso, el Corinthians mantuvo la presión, pero el Cali defendió con disciplina y apostó por el contragolpe. Leidy Cobos y Kelly Ibargüen tuvieron las más claras, incluyendo un intento de gol olímpico que fue salvado sobre la línea por Jaqueline.

Las dirigidas por Ángelo Marsiglia cerraron mejor el encuentro, pero no lograron romper el empate, forzando una definición desde el punto blanco que mantuvo en vilo a los hinchas de ambos equipos.

En los penales, Corinthians no falló ninguno de sus cobros. El único error llegó por parte del Cali, cuando Kelly Ibargüen estrelló su disparo en el travesaño, sellando el 5-3 final y el título para las brasileñas.

Pese a la derrota, el Deportivo Cali se despide con la cabeza en alto y una participación que lo consolida entre los grandes del continente. Este es el quinto subcampeonato del fútbol femenino colombiano en la Libertadores, tras las finales de Formas Íntimas (2013), América de Cali (2020) e Independiente Santa Fe (2021 y 2024).

La actuación del Cali demuestra el crecimiento y la competitividad del fútbol femenino en Colombia. Con jóvenes promesas, una defensa sólida y una arquera que fue figura durante todo el torneo, el equipo verdiblanco deja una huella de entrega, talento y esperanza para el futuro.