Esta enfermedad se caracteriza por presentar miedo o ansiedad intensa, generando un malestar y afectación al funcionamiento habitual de la persona en cualquier edad. Con frecuencia en este tipo de malestares, se dan episodios repetidos de sentimientos repentinos, los cuales son difíciles de controlar, siendo desproporcionados en comparación con el peligro real, surgiendo de esto una enfermedad que requiere tratamiento.

Los síntomas pueden iniciar en la infancia o adolescencia y continuar hasta la vida adulta. Ente los que se encuentran: Ansiedad generalizada, fobias, miedo, pánico.

Cabe destacar que el trastorno de ansiedad no solo implica estar preocupado, si no también puede ocasionar enfermedades mentales y físicas como, depresión, abuso de sustancias, dificultades para conciliar el sueño, problemas digestivos, dolor de cabeza, aislamiento social, mala calidad de vida, suicidio, entre otros.
Por ello, es necesario tomar medidas frente a ciertas situaciones para reducir el impacto de los síntomas y consultar ante las siguientes señales:

•    Preocupación que interfiera en su trabajo, relaciones personales o algún aspecto de su vida.
•    Si el miedo, preocupación, causan malestar que resulta difícil controlarlo. 
•    Sentirse deprimido.
•    Pensamientos o conductas suicidas.
•    Dificultad para dormir.
•    Sentirse cansado, culpable.

La psicóloga Estefany Martínez, de Bienestar Institucional de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, habló en LAUD 90.4 FM ESTÉREO, sobre la importancia de conocer los síntomas y tratamientos de esta afectación de salud mental y cómo se trata dentro de la Institución con la comunidad universitaria. 
 

Giovanna Sánchez Bustamante
Comunicadora Social y periodista.