La Plaza de Bolívar fue el escenario para que tanto niños como jóvenes vivieran una jornada especial de ‘Cultura se Toma la Plaza’, que se caracteriza por ser iniciativa liderada por la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, en el marco de la estrategia El Centro Vive, y en articulación con la Fundación Gilberto Álzate Avendaño – FUGA que busca por medio del arte y la cultura transformar el espacio público en un lugar de encuentro, aprendizaje y disfrute colectivo de participación gratuita.

“El Museo del traje trae una propuesta para retomar algunas estructuras de vestuario y reconstruir piezas a partir de ellas. Es retomar latas de gaseosa o de cerveza y comenzar a crear tejidos. Esta es una iniciativa de estudiantes de diseño de modas a nivel nacional a la que se le denominada ‘Que la basura no se vuelva paisaje’ creando ropa desde materiales no convencionales”, explicó Cesar Rubio, diseñador de modas a ‘Revista de la Mañana’.

También se disfrutaron actividades como el ‘Parchadero FUGA y sus Fuguitas’, un espacio diseñado para el disfrute y la recreación de la primera infancia. A través del mobiliario urbano que promueve la creatividad, el juego y la convivencia, generando entornos seguros donde los más pequeños pueden participar en actividades culturales como la música, la pintura y la literatura.

“Las bibliotecas itinerantes hicieron parte de esta actividad, ya que la Red del Distrito trabaja para llevar oferta literaria a sitios donde sea requerida. Contamos con programaciones que tienen lecturas para niños, especialmente, de origen colombiano de manera que hagan su primer acercamiento con los libros. Son más de 300 volúmenes, internet, sillas y mesas que llegan a las localidades y barrios”, explicó el profe Miguel, intermediador de este proceso. 

Por su parte, el Dueto violín-guitarra del programa Filarmónica al Barrio, el Taller ‘El agua en 2050’ y la actividad ‘Sabores viajeros’ hicieron un recorrido por el origen de los alimentos, desarrollado por el Museo del Oro para descubrir cómo los pueblos del mundo han compartido saberes y sabores por generaciones, fueron otras actividades destacadas de la jornada.