Por estas semanas se recuerdan dos acontecimientos históricos que pertenecen a las celebraciones patrias de Colombia, una es el 20 de julio de 1810 donde se llevó a cabo el Grito de Independencia y la otra es el 7 de agosto de 1819, en la cual se hizo efectiva la misma y fueron derrotados los españoles en territorio boyacense. Pero, más de 200 años después, las fechas históricas y su importancia fueron de alguna manera desplazadas por las connotaciones políticas que se han tomado, ya que en la primera cada año se instala una nueva legislatura del Congreso de la República y en la segunda cada cuatro años se posesiona el Presidente de la Nación.
 
“Es necesario tener sentido de pertenencia por estos hechos, si bien el 20 de julio fue transformado poco a poco en parte de nuestra identidad, contrario al 7 de agosto que no es recordado con la fuerza que se debería. Y esto se debe a que en la Constitución de 1886 se estipularon dichos días para resaltar el poder legislativo y ejecutivo”, dijo a LAUD 90.4 FM ESTÉREO, Arnovy Fajardo Barragán, historiador y docente de la Universidad Externado de Colombia. 

Importancia: Un paso a la Independencia

•    20 de julio de 1810: Conocido por el pleito en la casa de José González Llorente en Santa Fe (Bogotá). Esta fecha ha sido cuestionada por algunos críticos que afirman que no hubo gestos de independencia y respaldada por otros que aseguran que sí pasó. Lo que ocurrió fue que dos años antes España fue invadida por Francia a causa de las conquistas de Napoleón Bonaparte. Esto ocasionó desestabilización del Virreinato de la Nueva Granada (Colombia). En ella los criollos (personas nacidas en América, pero descendientes de españoles), buscaron reconocimiento y derecho en la toma de decisiones, pero al no obtenerlo aprovecharon la ocasión para crear una revuelta que dio origen a la Junta de Gobierno que asumió el poder temporalmente en nombre del rey Fernando VII y reemplazó al Virrey Antonio Amar y Borbón, que vivía en la ciudad. 

El desprecio del español Llorente por los criollos se evidenció al negar prestar un florero de su tienda para darle la bienvenida a Antonio Villavicencio, que por esos días llegaba desde Ecuador a Santa Fe. La disputa por la negativa llevó a que los criollos iniciaran la revolución que dio origen a la firma del Acta de Independencia por José Acevedo y Gómez. El documento fue el primer paso para la libertad, aunque su naturaleza inicial no fue la separación completa de España, su tinte fue de un gobierno local, sin intervención extranjera. 

Consolidación

7 de agosto de 1819: Pero a pesar de buscar una autonomía, España volvió a tomar el control del Virreinato y “entre 1810 y 1816, ante la llegada del militar Pablo Morillo (denominado ‘El Pacificador’ por instaurar el Régimen del Terror), los criollos que hicieron parte de las revueltas del 20 de julio fueron cambiando de percepción y buscaron la separación total con la Península Ibérica”, explicó el docente. Es ahí donde tomó fuerza la campaña que realizaba en su momento Simón Bolívar en territorio venezolano, pues se mostró como el líder que podía lograr la independencia. 

Y así fue, Bolívar se preparó con el ejército y los patriotas, “se consolidó como un estratega con una visión regional e integral, y esto fue lo que permitió organizar la campaña libertadora en la cual cruzaron los Llanos Orientales, subieron la Cordillera de Los Andes por el Páramo de Pisba y llegaron a la Provincia de Tunja donde en los combates de Gámeza, Pantano de Vargas y el Puente de Boyacá, vencieron a los españoles”. Es así como se consolida la independencia y en octubre del mismo año se crea la República de Colombia.

El docente invitó a profundizar más sobre la historia de la nación, a recordar estas fechas con sentido de pertenencia y orgullo, y a reconocer la relevancia de los hechos que han conllevado a conformar la patria de hoy. 

Conozca el Acta de Independencia aquí. 

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